Se diagnostica cómo esterilidad o infertilidad, cuándo tras un año de relaciones sexuales sin protección la pareja es incapaz de concebir o de llevar a término ningún embarazo. Se contemplan tanto las posibilidades del varón como de la mujer. La infertilidad puede ser primaria, nunca se ha llegado a concebir; o secundaria, se ha conseguido concebir en alguna ocasión pero, posteriormente, no se logra el embarazo.
La infertilidad puede ser masculina, femenina o de ambos miembros de la pareja.
La Infertilidad femenina
En las mujeres hay varios factores que pueden estar produciendo infertilidad. Una vez descartado los factores hormonales y emocionales, que también se tratan con acupuntura, nos centraremos en ver cuál de los siguientes factores pueden estar ocasionándola: debilidad constitucional, mujeres que rondan la cuarentena, mujeres que tienen sobrecarga de trabajo y de ejercicio, la exposición al frío y/o a la humedad, o una alimentación inadecuada. También el estrés es enemigo de la fertilidad.
La Infertilidad masculina
La infertilidad masculina tiene diversas causas como son el estrés, una mala alimentación o la falta de sueño. La edad y una mala salud también determina la calidad de los espermatozoides. La combinación de fitoterapia y acupuntura mejoran la calidad y la cantidad de los espermatozoides.