Durante los últimos meses, toda la población hemos cumplido las medidas y normativas de prevención decretadas por las autoridades.A pesar de ello, lamentablemente, en las últimas semanas se ha detectado un aumento de casos de contagio por SarsCov2, lo que está siendo denominado como “tercera ola”.
Por eso, es imprescindible seguir reforzando las medidas de prevención y protección de nuestro organismo, constituyendo el sistema inmunitario, nuestro principal escudo protector interno frente a agentes externos.
Para que nuestro organismo esté protegido, el sistema inmune cuenta entre otros mecanismos de defensa, con los glóbulos los blancos (células sanguíneas), cuyos precursores se forman en la médula ósea.La ciencia ha demostrado que un aporte constante de determinados nutrientes esenciales constituye un papel fundamental en el correcto desarrollo del sistema inmune, además de colaborar en su buen funcionamiento.
Unos regulan la respuesta inmunitaria del organismo frente a posibles ataques externos, mientras que otros tienen un papel fundamental en la producción de células indispensables para el correcto funcionamiento del sistema inmune.
También debemos evitar los hábitos perjudiciales, como el tabaco o el alcohol. Es por ello, que mantener un estilo de vida saludable puede ser una óptima forma de proteger nuestro sistema inmunitario. Del mismo modo, la acupuntura ha demostrado a través de numerosos estudios clínicos su eficacia y seguridad como técnica reguladora y tonificador del sistema inmunitario estimulando la actividad de los Linfocitos T, Linfocitos B, Macrófagos, y Células Natural Killer (NK), reforzando de este modo, la eficiencia del sistema inmune. En nuestra clínica ofrecemos tratamientos integrativos para reforzar el sistema inmune, que combinan:
- Protocolo específico de acupuntura
- Fitoterapia
- Suplementación nutricional
- Pautas dietéticas específicas
Referencia: Yamaguchi N et al. Acupuncture Regulates Leukocyte Subpopulations in Human Peripheral Blood.Evid Based Complement Alternat Med. 2007 Dec; 4(4): 447–453.